Atléticos

Este deporte tiene muchos beneficios por ejemplo nos ayuda a mantenernos en forma ,a estar saludables, buena inmunidad y sobre todo si nos gusta esta nos ayudara a relajarnos y con el estrés si lo tenemos Al practicarlo tenemos que tener en cuenta un buena alimentacion ya que al realizarlo tenemos que realizar una nueva dieta la cuál contenga productos ricos en hidratos de carbono ,frutas y verduras ,son esenciales para practicar este deporte y mantenernos sanos Si lo realizamos y de verdad queremos tenerlo como una nueva forma de vida ,al final tendremos buenos resultados ya sea físicos o mentales El atletismo es una forma de vida ,la cual se lleva acabo con una buena disciplina y con ganas de realizarlo

Argentina participó por primera vez de unos Juegos Olímpicos en Paris 1924. El Polo y el boxeo estrenaron el medallero, pero no fueron los únicos. En el Estadio Olímpico “Yvesdu-Manoir”, de Colombes, Luis Antonio Brunetto se colgó la presea de plata en Salto Triple. En 2024 se cumple el centenario de ese logro en la misma sede y los oriundos del Rio de La Plata tienen un joven con el potencial de homenajear aquel suceso histórico. Luciano Méndez es un atleta de la provincia de Salta que se especializa en Salto triple. Si bien él no se pone presión, sus pasos están siendo los indicados para llegar cada vez más lejos. Participó en los Juegos de la Juventud en Buenos Aires 2018 y es el primer argentino campeón sudamericano en mayores tras 80 años. Su manera de enfocarse lo ayuda a cumplir sus metas: “Planifico todo con mucha energía y me enfoco en la prevención de lesiones para poder entrenar bien. Con una buena preparación las competencias van a salir mejor y eso atraerá a los patrocinadores”. Se empezó a interiorizar en la prueba porque no es fácil. Es muy técnica y requiere de fuerza. Aunque el impacto que reciben las rodillas en cada salto es una preocupación porque puede incurrir en una contusión: “Nunca se termina físicamente de la mejor manera, siempre termino dolorido. Se trabaja mucho en el gimnasio, en el cuidado y la recuperación. Tengo un psicólogo también para ocuparme de todo esto”. A medida que su entrenamiento en velocidad, fuerza, resistencia e intensidad fue progresando, sus consagraciones como juvenil también: “Logré el récord U18 en Gotemburgo, Suecia. Fue algo emocionante, además fue un avance en las distancias que salté. Esto me permitió clasificar a una competencia en Nairobi”. Cumplió una de sus metas al ser parte de un Juego Olímpico en su país. Los recuerdos vienen acompañados con una mezcla de emociones y frustraciones: “Fue una experiencia increíble. En lo social y en lo cultural también. Argentina parecía un país de primer mundo. En lo deportivo no me fue muy bien, no fue el rendimiento que esperaba. Los meses previos fueron duros para mí, venía de una lesión y los dolores no me dejaron entrenar con normalidad. Quiere disfrutar su juventud y realizar estudios complementarios. Se proyecta para competir en los Juegos Olímpicos de Paris 2024. Su anhelo y su deseo es lograr una medalla olímpica y así poder emular la proeza Luis Antonio Brunetto en 1924. De ello dependerá su disciplina, esfuerzo y talento para poder repetir la historia 100 años después.

Un viejo amigo me contó que hizo un viaje al norte de México, estuvo por el desierto y la sierra, se encontró con una comunidad que lo acogió unos días. Me hubiera gustado estudiar para doctor, le platicaba a uno de los jefes de la comunidad y aquel hombre no pudo entenderla. Mi amigo trató de explicarle el verbo “hubiera”, el hombre aun con ejemplos, seguía sin llegar al entendimiento de aquella palabra. ¿Cómo explicas un “hubiera”? ¿Cómo explicas un tiempo que no puede perderse porque todavía estás aquí? Los siguientes días en aquella comunidad en lugar de tratar de explicarles el “hubiera” mejor trató de comprender la concepción del tiempo de aquellas personas. Ellos no podían entender un verbo que hablara de un tiempo que se perdía en el pasado y se manifiesta casi como una lamentación en el presente. Quizás era por eso, es que aquella comunidad vivía tanto el presente, que su lenguaje no entendía el pasado y tampoco les asustaba el futuro.