Toda la esencia del fútbol reside en su elemento más simple: la pelota. Debe tener la capacidad de volar en el aire en una cierta trayectoria dirigida por el jugador con sus pies y, lo más importante, tener un rebote predecible. Las primeras versiones de una pelota de fútbol eran hechas con la vejiga o el estómago de un animal (cerdo, buey) pero se rompían fácilmente cuando eran pateadas con fuerza. Pero a medida que pasó el tiempo la pelota se fue refinando hasta dar lugar a los modernos balones de fútbol que conocemos hoy.

Con estas rudimentarias pelotas diferentes pueblos y civilizaciones empezaron a desarrollar juegos que guardan cierto parecido con el fútbol moderno y es en el lejano oriente donde encontramos la más antiguar referencia.

Se sabe que hace ya 3000 años en la antigua China se usaba una bola de piel de animal llena de piel o plumas la cual debía hacerse pasar por un arco o portería ubicada en lo alto de unos postes de hasta 5 metros de altura y se presume que se desarrolló como un entrenamiento militar. El juego se llamó "Zhu Chu" y según los registros antiguos asociaban el pasar la pelota redonda en marco con el símbolo de armonía Yin y Yang.

Ilustración china que muestra el juego de Zhu Chu y las porterías elevadas sobre postes

Los griegos y los romanos eran famosos por sus arenas y estadios donde organizaron todo tipo de juegos divertidos, entre estos se encontraba una especie de fútbol llamado "episkyros" por los griegos y "harpastum".por los romanos. El objetivo de ambos era el dominio del balón. "Harpastum" proviene de la palabra griega "Harpazein", que significa "atrapar". La pelota usada era pequeña (del tamaño de una toronja) y rígida pues estaba llena de arena.

Fragmento de un antiguo mural romano que ilustra el juegos de harpastum

El juego se llevaba a cabo en un campo delimitado y donde cada jugador ocupaba una posición en el campo como lo es hoy y probablemente los equipos constaban de 12 jugadores. El juego en sí estaba más cerca del rugby o el balonmano pues la pelota se pasaba con las manos y no con los pies, y exigía una agilidad considerable. Las reglas se asemejan en algo como el fútbol pero a la inversa, es decir, el objetivo era mantener la pelota en su propia mitad del campo y no permitir que el oponente la tome y se la lleve a su campo. Se anotaba un punto cuando la pelota “robada” se llevaba a su mitad y tocaba el suelo.

Por su parte los guerreros vikingos tenían juegos, un tanto grotescos, donde pateaban las cabezas de sus enemigos decapitados.

Los guerreros vikingos acostumbraban jugar pateando las cabezas de sus enemigos decapitados.

También se sabe que sociedades más civilizadas, como japonesas, persas, egipcias, sirias e indias, también llevaron a cabo diferentes tipos de juegos de pelota.

Uno de los mas estudiados es el de los Los aztecas en México quienes crearon su propio juego de fútbol con una bola de piedra cubierta con una gruesa capa de goma. El juego, conocido como “tlatchi”, se jugó entre dos equipos de 7 personas y fue un evento muy importante tanto de carácter lúdico como ceremonial, al punto que construyeron estadios especiales para jugarlo.

Juego de tlatchi practicado por los aztecas

Como habrán podido darse cuenta el fútbol moderno no es otra cosa que el resultado de amalgamar y depurar diferentes juegos previamente inventados por diversas civilizaciones, pero de lo que no cabe duda es que correr y dominar una pelota fue, es y seguirá siendo, un juego sumamente entretenido.

Saludos,

Sergiocorreiab