Real Madrid enfrentaba hoy a Huesca, un conjunto que se encuentra último en la Liga y que no ha sabido más que ganar un solo partido. El conjunto merengue venía dando síntomas de mejoría en partidos anteriores y quería seguir mejorando ante el equipo que parecía mas asequible posible en liga.

Empezaba el partido con intensidad por parte de ambos, alto ritmo y gran entrega por parte de los dos. Bale pondría por delante al Real Madrid con un gol propio de sus inicios en Tottenham cuando era lateral izquierdo, llegando desde atrás y por sorpresa. El Huesca se apagó luego del gol de los Merengues y llegaría al descanso del partido un poco cabizbajo.

Empezaba el segundo tiempo y salían con una actitud completamente inversa a la que terminó el primer tiempo, intenso y con ganas de remontar el marcador, dominó el balón y el partido por la mayor parte del segundo tiempo, logrando inquietar en muchas ocasiones a Courtois y exigiéndole al máximo.

Poco más que agregar del partido, en donde si bien el Real Madrid ganó con un gol tempranero, no pudo lograr dominar el partido y dejar una sensación de ser el justo ganador del partido.