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Todavía no terminaba de atormentar a los aficionados del Chelsea como DT, cuando ya estaba siendo anunciada su llegada a la Juventus para la temporada 19/20. El hombre cuyo futbol alcanzó la cúspide en algunas temporadas con el Napoli, sufría un descrédito semana tras semana con el #SarriOut como clamor popular. Hoy, las cosas no son distintas con la Juventus. Aquí es donde intentaremos averiguar qué es lo que sucedió y por qué sigue pasando.

¿De dónde viene Sarri?

Sarri es originario de Nápoles, no creció con una carrera futbolística, él se dedicaba a ser un dirigente de banco. Su pasión por el futbol era parecida a la de muchos de nosotros, solamente se quedó en el nivel amateur. Pero Sarri estaba decidido a continuar cerca del futbol y quererlo volver su vida. Es así como empezó a dirigir equipos pequeños de las divisiones regionales, fue saltando de equipo en equipo cada año, hasta que encontró estabilidad en el Empoli.

En el periodo de Sarri con el Empoli, es importante destacar su porcentaje de efectividad superior al 50%, estos méritos fueron los que lo llevaron a su casa, a dirigir al Napoli. Con el Napoli se volvió un animador constante de la competencia, que había venido en decadencia con la caída de ambos equipos de Milán. El futbol que practicaba se empezó a conocer como "Sarriball", porque intentaba hacer un toque de balón de manera ágil y trataba de dominar la posesión. Se intentaba hacer algo así como el estilo del Barcelona, de quien se ha declarado aficionado el mismo Sarri; especialmente, es aficionado de Pep Guardiola.

A pesar de toda esta historia, Sarri jamás había ganado un título con un club. Sin embargo, la propuesta de su futbol y una oportunidad financiera, fueron las que lo hicieron cambiar de aires. Es aquí donde el Sarri contemporáneo entra en escena, del que vamos a empezar a hablar ahora.

El humo del "Sarriball" y los grandes equipos

Pasar del Napoli al Chelsea, claro que representa un cambio importante. Estamos hablando de un equipo que fue dirigido por Scolari, Ancelotti, Hiddink, Mourinho y Conte, entrenadores que sabían lo que es la gloria de un título y siempre querían seguir ganando. De entrada, la historia de Sarri en el Chelsea pintaba para ser atípica a lo que los aficionados blues estamos acostumbrados. Y la cosa no ha sido muy diferente con la Juventus, pero es momento de irnos por partes.

El martirio de Stanford Bridge

A pesar de iniciar de una forma prometedora la temporada, el equipo empezó a caer en todos los juegos que se topaba con rivales realmente competitivos. Si bien, no es el Chelsea que contaba con figuras como Drogba, Cech, Lampard y Terry compartiendo cancha, era un equipo nada despreciable que contaba con Hazard como buque insignia y con N'Golo Kanté como motor en la recuperación. Y no solamente decaía el equipo en resultados, sino que su funcionamiento era cada vez más pobre.

A pesar de traer a Jorginho, Sarri pecaba de una incapacidad por colocar a Kanté en la posición donde más podía rendirle. Él prefiere jugar con un mediocentro que reparta balones, antes de jugar con uno que sepa recuperar. Se negó a jugar con Jorginho como volante y pasó a desplazar a Kanté en esa posición. El francés podía cumplir ahí, pero se veía disminuido y dejaba ver la debilidad del cuadro blue en cada jugada en contra; entraban como cuchillo en mantequilla.

El equipo nunca logró adaptarse al futbol de Sarri, no se sentía pasión en el equipo y había una tremenda "Hazard-Dependencia". Si el belga no estaba en un buen día, el equipo iba a carecer de opciones ofensivas. Y los malos días sí llegaron para algunos del equipo, porque Sarri se negaba a rotar y cansaba mucho al equipo titular. Poco a poco, la distancia entre los dos de arriba se empezó a hacer más grande, mientras que los dos de abajo se acercaban peligrosamente.

La temporada terminó con el Chelsea lo dejó a más de 20 puntos del primer y segundo puesto, pero también lo dejó a menos de 3 puntos de ventaja ante sus perseguidores. Si se considera que la temporada del Arsenal fue mediocre en la EPL, cuánto más no sería la del Chelsea, siendo un equipo que cuenta con mejores jugadores y presupuesto.

Tabla de posiciones de la temporada 18/19 en EPL

Este desempeño en liga, aunado a las dolorosas eliminaciones de las copas locales, terminó relegando la única esperanza de sentir un título, a la Europa League. Y no lo tomen a mal, pero un equipo como el Chelsea, hasta en sus peores días podría ganar este torneo; lo demostró con Benítez, con quien jugaban terrible, y aún así, consiguieron quedarse con el torneo. No fue diferente el caso con Sarri, la Europa League fue conquistada en una holgada final ante el Arsenal, y es así como Sarri conseguía el primer título en su historia como Director Técnico.

Este título no era suficiente, puesto que la gente estaba cansada del funcionamiento del equipo y el "#SarriOut" era un tema constante al final de cada partido. La gente necesitaba un cambio que se adhiriera más al ADN del club. Se deseaba un equipo aguerrido, con futbol directo y solidez defensiva, y nada de esto se podía conseguir con Sarri, quien trajo un futbol de posesión, lento y un tanto aburrido, poca solidez atrás y falta de intensidad. Es posible que su estilo no haya encajado con el Chelsea, pero la plantilla pudo ayudarle a conseguir un título, que es algo que le funcionaría para su Currículum y terminaría llevándolo a la Juventus.

El mal que aqueja a la Juventus

Creo que nadie hubiera vaticinado ver a Sarri dirigiendo a la Juventus, y no solamente eso, la Juventus con Cristiano Ronaldo como figura. El equipo se ha intentado armar para conseguir la Champions League, pero las faltaba la pieza final en la dirección técnica, y se decantaron con Sarri para lograr el objetivo. Por ahora, parece haber sido uno de los más grandes errores de la dirigencia bianconera en época reciente.

Desde su llegada, las dudas han sido una constante en el equipo que dirige Sarri. El equipo ha perdido la solidez defensiva que le ha caracterizado, no es un equipo avasallador contra equipos más modestos y tampoco es el equipo contundente al contragolpe en partidos complicados. Todos estos ingredientes nos han dado como resultado una derrota en la Super Copa de Italia contra Lazio, que fue bastante humillante porque no metieron ni las manos; incluso fue la primera vez que Cristiano Ronaldo perdía una final en años. Además de esta derrota, se está viviendo una participación dudosa en el torneo de copa y una liga donde nadie se siente seguro de que vaya a ganarse; una realidad opuesta a los años anteriores, donde la Juventus dominaba toda competición de su país.

La afición parece estar cansada de verlo alinear a jugadores en posiciones que no rinden, arriesgar balones atrás, no saber recuperar la pelota y depender únicamente en las individualidades para salir adelante. Es probable que, sin Cristiano Ronaldo, esta Juventus estaría muy lejos de competir por el título de la Liga. Y esto es muy curioso, ya que este equipo siempre ha sido precisamente eso, un equipo; hoy parece una banda de figuras que aparecen para salvar el pobre funcionamiento exhibido. Todo lo explicado parece haber fracturado el ánimo del aficionado de la Juventus, no se espera nada al ver un partido, solamente se limita escribir "#SarriOut" al final de cada jornada; tal cual pasó con el Chelsea.

Es cierto que se han ganado muchos partidos, pero la sensación no ha sido positiva. Cuando se gana, se piensa "pudimos perder o empatar", y cuando se pierde, usualmente se dice "no siempre puede aparecer una individualidad a salvarte". Básicamente, el juego colectivo ha muerto, y no, no es porque no se entiende el estilo de Sarri, es porque ese estilo no puede funcionar en estos equipos tan grandes y con un ADN completamente competitivo. La afición, los jugadores y la historia, no avalan el funcionamiento que Sarri propone, y si no puede hacer funcionar a figuras como con las que cuenta ahora, es lógico que la afición cuestione su capacidad. Hoy, creo que ningún aficionado de la Juventus puede estar complacido con lo que ha visto en la temporada.

Mi opinión como afectado

Solamente tengo dos equipos de Europa a los que apoyo a muerte y me considero un gran fan, y para mi tristeza, son la Juventus y el Chelsea. Sarri pasó por ambos equipos en años consecutivos y claro que me ha afectado bastante, estoy cansado de sintonizar partidos para no disfrutarlos; podría decirse que he sufrido a Sarri por dos años.

El Chelsea y la Juventus comparten una idea de juego similar, que data de solidez defensiva, mucha garra y contundencia al ataque, no se entiende el futbol de manera distinta. Es por esto, que Sarri ha sido un martirio para mí, porque no ha logrado que su idea guste, o siquiera logre resultados dignos de celebración. Veo a jugadores deprimidos y a una afición desesperada, lo mismo que vi en el Chelsea, lo estoy viviendo ahora con la Juventus

Yo no digo que Sarri sea un técnico malo, pero simplemente opino que no está al nivel de equipos grandes; la vara le ha quedado alta. Creo que funciona mejor en segunda línea, sin reflectores y con equipos sin figuras. Carece de manejo de vestidor, como se vio con el Chelsea, y también carece de conexión con la afición y no transmite emociones. Para mí, estas cualidades también son importantes en entrenadores que pretenden dirigir equipos como la Juventus y el Chelsea, porque su afición se extiende más allá del continente, se necesita transmitir más porque le llegas a más gente.

Si les soy sucinto, creo que Sarri debió irse en el parón de invierno. Pero bueno, nos sigue dirigiendo, así que no auguro nada bueno para la Juventus en este año. Si estuviésemos compitiendo por la Europa League, seguramente se ganaba con facilidad, pero esto es Champions, son muchos escalones más arriba. Por lo pronto, parece que Maurizio Sarri no está preparado para el reto, no importando los jugadores que le pongas, no lo estará con este equipo. Desde ahora anticipo, porque ya lo viví con el Chelsea: No esperen nada de Sarri, no va a cumplir con sus expectativas.

En fin, le deseo que tenga éxito en un club alejado de los que yo apoyo y que esta temporada podamos lograr algo, aunque sea por golpe de suerte o esfuerzos individuales. Yo ya perdí la confianza hace mucho tiempo, les deseo fuerza a los que aún la tienen. Por lo pronto, voy a suscribir al clamor popular: #SarriOut