En partido de hoy fue una gran sorpresa, ya que la favorita Serena Williams cayó en picada porque la joven Simona Halep, la venció (doble 6-2, en 56 minutos). Ha sido muy fuerte las últimas finales a las que ha participado, la primera fue cuando cayó en la final de Wimbledon del curso pasado, frente a Angelique Kerber; no pudo después con la jovencita Naomi Osaka, a la que de paso le arruinó su extraordinaria irrupción en Nueva York; y este sábado, otra vez sobre la hierba inglesa, tampoco pudo contener el tenis triturador de Halep

La rumana, ganó el año pasado su primer gran título en París y ahora su expediente también incluye Wimbledon, además de haber defendido el número uno durante 64 semanas. Hasta hace no demasiado se le negaba la gloria, había perdido las tres finales previas de Grand Slam que disputo.

Arriesgó esta temporada con un relevo en el banquillo, dejando atrás al técnico Darren Cahill y apostando por su compatriota Daniel Dobre, y de momento la nueva fórmula funciona. Este sábado se encumbró en el templo tenístico de Londres.

Casi siempre está en las quinielas Halep, que redujo a Serena en una final disputada durante un buen rato a dos velocidades completamente diferentes. El brío de la rumana contrastó con el sesteo inicial de la estadounidense, que cuando todavía estaba despertándose ya había encajado cuatro juegos consecutivos.