El día lunes 19-11-2018 será difícil de borrar para el árbitro Ovidiu Hategan, ya que se enteró de una manera no muy ocurrente que su madre falleció. Todo sucedió en el partido de la UEFA Nation League entre Alemania y Holanda, cuando en el entretiempo, llamaron al árbitro rumano para informarle sobre el fallecimiento de la madre.

Sin embargo, Hategan siguió con su profesionalismo y no dejo de pitar el partido. Llego hasta el final del juego cuando por fin pudo soltar el llanto y se derrumbo, donde varios jugadores se acercaron para consolarlo por tal mal momento.

Uno de esos jugadores fue el capitán de la selección Holandesa Virgil van Dijk, que le dijo unas emotivas palabras, aclarándole que pitó un buen partido y dándole el pésame. Para Van Dijk no fue gran cosa, pero dijo que con eso esperaba que el árbitro se sintiera bien y ese gesto fue aplaudido en las redes sociales, realzando la humanidad de los jugadores de futbol.

Cosas como estas son las que realzan el sentido humano de los atletas, son cosas que muy pocos vemos y que debemos entender que ellos van a jugar o pitar un encuentro cuando les pueden pasar situaciones tan difíciles como esa y sin embargo, su profesionalismo no lo dejan para nada.