El 3-7 de Nueva Jersey y las anteriores operaciones de Hermoso y Llorente hacen casi imposible su fichaje.
Ante esta situación, las salidas de James Rodríguez y Gareth Bale se han convertido en problemas complicados. Aunque Gil Marín dijo antes del derbi de Nueva York que “sería bonito” que James terminara jugando en el Atlético, a día de hoy esa situación es imposible. Se trata de un gran riesgo para Florentino que el colombiano vaya allí y triunfe, sobre todo después de haber vendido al Atlético a un hombre fuerte de la cantera como Marcos Llorente y que en el Metropolitano haya terminado jugando otro producto de La Fábrica, Mario Hermoso.
En el caso de Gareth, parece que hay un acuerdo con el Jiansu Suning para jugar en la Superliga china, ahora hay voces de la directiva que hablan de la conveniencia de jugar en Madrid una temporada más. “No encontraremos en el mercado un jugador que aporte lo que él por menos de cien millones”, llegan a justificar, aunque las diferencias con Zidane son insalvables. El objetivo es no dejarle marchar libre.
Ésta complicada situación de James para ir al Atlético hace que el que se esté frotando las manos sea el Nápoles. El conjunto de Carlo Ancelotti es el que más posibilidades tiene de acoger al jugador colombiano. “Nos gusta y el Madrid quiere venderlo”, llegó a decir el ex del Real Madrid. El presidente del Nápoles, Di Laurentis lo quiere gratis, en calidad de cedido, pero el Madrid no está dispuesto a otra cosa que no sea vender al colombiano por 45 millones de Euros.
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