Mientras que nuestro querido tío Riot se aventuró y sacó un shooter en época de pandemia generando que nuevos jugadores quieran ingresar en la escena competitiva, mientras que League of Legends sigue siendo foco de penalizaciones por actitudes antideportivas.

El famoso juego Valorant, un shooter en primera persona multijugador y gratuito que lanzó Riot Games en junio de este ajetreado 2020 y que en poco tiempo comenzó a reclutar gente de otras importantes plataformas, League of Legends, Overwatch y CSGO

Después del hype y la expectativa que generó la reciente creación de Riot, además, de llamar mucho público dentro de Twitch influyó mucho la posibilidad de los drops para probarlo antes que otros jugadores por lo que nuestro querido Lol se vio seriamente golpeado por la falta de impacto en los distintos espacios donde se realizan transmisiones en tiempo real.

De lo único que no pudo apartarse Valorant es de la toxicidad que los distintos juegos traen en sus raíces, bastaron unas pocas semanas para que el cooperativo 5 contra 5 se volviese tedioso y con múltiples situaciones de impunidad detrás del anonimato.

Muchas voces reconocidas en la región latinoamericana se dedican a crear consciencia sobre esta problemática y lo importante que es limpiar estos espacios de gente tóxica que se dedica a obstaculizar la experiencia de juego de algunos usuarios.

De todas formas los distintos jugadores profesionales acostumbrados a los shooters apuestan por formar parte del juego y deleitarnos en la escena competitiva.

Mixwell( Óscar Cañellas) está posicionado como el mejor jugador español en la beta de Valorant y actual fichaje por parte de G2 junto con Patitek, Pyth, Ardiis y DavidP quienes forman parte de uno de los mejores rosters europeos para el flamante juego de Riot Games

Confiando plenamente en que la escuadra de esta región dejará el shooter en lo más alto y en segundo plano el acoso, la toxicidad y el abuso por parte de las figuras anónimas para que nuestra estadía en Valorant sea una de las mejores experiencias dentro del contexto sanitario que estamos atravesando en este tan sorprendente año 2020.