Según estudios antropológicos, los ancestros de la época Neolitica, apostaban, y usaban un hueso que se ubica en el pie y tiene forma de dado, llamado astrágalos, para hacer sorteos sobre las actividades que debían realizar, como la cacería y otras tareas.

Revisando un poco más en la historia, llegamos a que Los griegos, fueron quienes iniciaron realmente las apuestas deportivas, a través de sus Juegos Olímpicos, y también en Roma en las luchas de Gladiadores, mientras los espectadores apostaban a un gladiador, estos apostaban su propia vida.

JUEGOS OLIMPICOS EN GRECIA
GLADIADORES EN CIRCO ROMANO


Con el paso del tiempo, aquellas apuestas de la Edad Media dejaron paso a las carreras de caballos, algo que se extendió como la pólvora en el Reino Unido. Fue tal su éxito que los colonos ingleses se encargaron de llevar esta tendencia a Estados Unidos, donde también tuvo un gran éxito y se convirtió rápidamente en uno de los principales entretenimientos del público en general.

Ya a principios del siglo XX las carreras de caballos eran todo un acontecimiento, pero también comenzaron a aparecer las apuestas para deportes como el fútbol, deporte que poco a poco empezaba a tener cada vez más éxito. Tras ello, y con la proliferación de otros deportes, fue ampliándose el abanico de posibilidades para apostar

Para 1934 fue fundada una de las primeras Casas de Apuestas llamada William Hill, cuando las apuestas eran ilegales en Inglaterra, más no en Estados Unidos, donde ya se iniciaba el florecimiento de Las Vegas, ante la legalidad de las apuestas.

Sin embargo, desde mucho antes existían casas de apuestas ilegales en manos de famosos mafiosos, como Meyer Lansky, quien fundó unas en Miami y Nueva Orleáns, pero remontándonos un poco más en los años, encontramos el casino de Montecarlo, en el Principado de Mónaco, que fue construido en el año 1878.

Finalmente, las apuestas deportivas llegan al internet de la mano de Betandwin, actual Bwin, que vio luz al año 1997, con sede en Gibraltar

El juego online ha marcado un antes y un después en el mundo de las apuestas deportivas. A partir de la aparición de internet, se produjo un crecimiento exponencial de la cantidad de compañías en el sector, la facturación del mismo y el comportamiento y prácticas del consumidor hasta hoy en día.