Los Dodgers de Los Angeles tienen 30 años sin ganar una Serie Mundial, ya que no alcanzan una corona desde la temporada de 1988. Si bien es un lapso muy prolongado, no es tan largo como los que han sufrido otros históricos equipos en la MLB.

Sobre sequías, una muy recordada, fue la de los Boston Red Sox, quienes pasaron 86 años sin ganar un banderín, en el lapso comprendido entre 1918 y 2004. Esta larga pausa se identificaba como la “Maldición del Bambino”, aludiendo a la venta de los Medias Rojas de Boston a los Yankees de New York, de quien quizás ha sido el jugador más recordado de la Grandes Ligas en todos los tiempos, Babe Ruth.

Otros equipo que tuvo una larga espera, aún mayor a la de los Red Sox, fue la de los Chicago Cubs, conjunto que esperó 108 años para ganar nuevamente una Serie Mundial, período que estuvo comprendido entre los años 1908 y 2016. Los Cubs también tenían sobre sus hombros otra maldición, “La de la Cabra”.

Qué sepamos los Dodgers no tienen ninguna maldición específicamente identificada, pero de no ganar este año la Serie Mundial, creo que las preocupaciones de su mala racha se van a incrementar exponencialmente.

A título de evocatorio, hay que mencionar que en esa última Serie Mundial ganada por los Dodgers, se produjo un episodio inolvidable para los aficionados del béisbol, y muy especialmente para los fanáticos de los Dodgers, ya que en esa serie de 1988, en el 1er. juego, Kirk Gibson, fuertemente lesionado de ambas piernas, casi manco, salió a batear de emergente en la segunda del noveno, y le conectó un cuadrangular al relevista estrella del Oakland, Dennis Eckersley, para dejar en el terreno a los Atléticos. Sobre este episodio hay incontables reseñas, por lo dramático que fue; ciertamente inolvidable.

Los Dodgers acaban de ganar en 7 juegos el Campeonato de la Liga Nacional a los Cerveceros de Milwauke, una serie realmente muy disputada, la cual les dio el pase para enfrentarse a los monarcas de la Liga Americana, los Medias Rojas de Boston.

Los Red Sox parten como favoritos ante los Dodgers de los Angeles, y al igual que vaticinamos que los Astros de Houston no repetirían el título de la Serie Mundial este año, tenemos el pálpito que los Dodgers terminarán con su sequía de 30 años.

Para terminar, y solo a efectos comparativos, en Venezuela se habla mucho de la cantidad de años que tienen Los Tiburones de La Guaria sin ganar un campeonato en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, pero esta sequía es ligeramente superior a la de los Dodgers en las Grandes Ligas, ya que los escualos tiene 32 años sin alcanzar un campeonato, habiendo sido su último título el de la temporada 1985/1986.

Bueno, lo que queda es esperar la voz de Play Ball de esta interesante Serie Mundial del 2018 que se avecina.