Luis Ernesto Aparicio Montiel al ser firmado por los Tiburones De La Guaira, para jugar en la Temporada 63-64, puso como condición al dueño de ese equipo, que el jugaría con los Tiburones si y solo si, firmarán a dos jóvenes jugadores Zulianos, quienes eran amigos personales de Aparicio Jr y que esos amigos eran nada más y nada menos que los grandes ligas Ángel Bravo y José Herrera.
El propio Pedro Padrón Panza, fue hasta la casa de Aparicio Jr, en Maracaibo a finales de 1963 para estampar la firma de este joven pelotero, tocando su puerta a muy tempranas horas de la mañana y adelantándose a los otros dueños de equipos.
Esa es una anécdota muy interesante de nuestro béisbol, ya que el Negro Prieto dueño de los Leones, había contactado vía telefónica a Luis Aparicio Ortega (El Grande) para tratar de que hablase con Aparicio Jr, para que volviese a vestir el uniforme del Caracas, puesto que estaba sin contratación en el béisbol profesional por la cancelación de la Liga Occidental.
Padrón Panza había escuchado esa noticia que se había fugado desde el Estadio Universitario, por que Prieto, saldría a primera hora a la ciudad de Maracaibo vía aérea, Padrón Panza para adelantarsele salió desde Caracas en la noche para amanecer temprano en la casa de Luis Jr., en Maracaibo, y en efecto así sucedió, Padrón Panza averiguo por medio de consultas donde era la residencia de los Aparicio Llorente, y a las 6:00 am estaba tocando la puerta de la casa, Luis bajo todavía en pijamas y se asomó y al ver a este caballero Padrón Panza se le presentó como el gerente general de los Tiburones, el cual quería hacerse de sus servicios para defender los colores litoralenses, y además le comento que había viajado desde la capital toda la noche para poder contratarlo, en esos momentos, cuenta el propio Padrón que Aparicio Jr, recibió una llamada de su padre para decirle que el dueño del Caracas vendría hasta Maracaibo para firmarlo, a lo que Luisito le contestó, "No papá decile al Sr. Prieto que me disculpe por no jugar con el Caracas, pero ya le di mi palabra al gerente general de los Tiburones para jugar con ellos, y creo que ese equipo necesita más mi ayuda que los Leones", por supuesto el viejo Aparicio Ortega notifico al dueño del equipo melenudo la negativa de la firma, y cuenta jocoso Don Luis que su padre le dijo que el Negro Prieto se había enojado mucho al conocer la noticia, Padrón Panza se había anotado la victoria, después del desayuno en la casa de Aparicio Jr, este le dijo que se preparará por que la condición de firmar no era en broma, había que buscar a Ángel Bravo en su pueblo, Santa Rita, y después ir hasta Mene Grande a firmar al joven Jose Herrera, salieron como a las 9:00 am para la población de la Costa Oriental en el Cadillac rojo de Luis, ya que Padron Panza había manejado toda la noche y no conocía las direcciones de los nuevos jugadores.
Esa es la verdadera historia de la llegada de Luis Aparicio a los Tiburones De La Guaira.
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