No importa lo que los Yankees de Nueva York puedan hacer durante el resto de la postemporada, Aaron Boone es el Gerente del Año en la Liga Americana. Tomó un equipo diezmado por lesiones, y utilizando partes dispares proporcionadas por el gerente general Brian Cashman, y lo convirtió en un ganador de 103 juegos que todavía está luchando contra los astros de Houston en la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Si los Yankees ganan su 28ª Serie Mundial no importa en lo que respecta a este premio. Siguen a los Astros 2-1 en la mejor serie de siete que continúa el miércoles por la noche, si el clima lo permite, con el 4to Juego en el Yankee Stadium.
Los premios otorgados por la Asociación de Escritores de Béisbol de América son solo para el desempeño de la temporada regular.
Los logros de postemporada son la guinda del pastel proverbial para un trabajo que ya está bien hecho. A pesar del caos de la lista, los Yankees ganaron la Liga Este por siete juegos sobre los Rays de Tampa Bay, la primera vez que ganaron su propia división desde 2012.
Boone fue una gran razón para ese éxito.
"Quiero decir, eso es halagador y todo eso, pero es más un producto de lo que ha hecho el equipo y de lo que ha hecho nuestra organización", dijo Boone el martes antes de la derrota por 4-1 de su club en el Juego 3. "Pero estamos atrincherados en los Astros y el ALCS en este momento. Estoy consumido con esto en este momento”.
Para ilustrar cuán grave era la difícil situación de Boone, en un momento, los Yankees estaban tratando de competir con jugadores por valor de $ 81,9 millones en la lista de lesionados. Su nómina general para fines de impuestos de lujo esta temporada fue un tercero en las Grandes Ligas de Béisbol $ 234 millones.
Boone nunca tuvo a Jacoby Ellsbury ($ 21.1 millones). Tenía a Giancarlo Stanton ($ 26 millones) por solo 18 juegos, CC Sabathia ($ 8 millones) por 22 aperturas y Aaron Hicks ($ 6.3 millones) por 59 juegos. Didi Gregorius ($ 11.75) millones y Aaron Judge ($ 684,300) se perdieron los primeros meses de la temporada.
Troy Tulowitzki, ganando el mínimo de $ 555,000 esta temporada de los Yankees y $ 20 millones de los Azulejos de Toronto, jugó 34 juegos antes de que una lesión en el tobillo derecho no solo terminara su temporada, sino también su carrera.
Luis Severino ($ 4.5 millones) se perdió toda la temporada con una lesión en el hombro derecho, volviendo a hacer solo cinco aperturas, dos en los playoffs, incluida la pérdida del martes en la que solo pudo trabajar en la quinta entrada.
Incluso durante esta serie actual, Stanton vuelve a salir con una lesión en la pantorrilla después de golpear un cuadrangular en la victoria por 7-0 del 1er Juego. Se ha perdido los últimos dos juegos, ambas derrotas yanquis, pero no ha sido retirado de la lista. Si los Yankees hacen eso, Stanton no será elegible para la Serie Mundial. Por supuesto, los yanquis todavía tienen que llegar allí.
Hicks regresó a tiempo para el ALCS a pesar de perderse todos los juegos de la temporada regular después del 2 de agosto con un dolor en el codo derecho. No comenzó su temporada hasta el 15 de mayo debido a una mala espalda.
Dellin Betances regresó en septiembre de una lesión en el hombro derecho solo para desgarrar su tendón de Aquiles izquierdo saltando del montículo en Toronto después de ponchar a dos bateadores.
Domingo German, su mejor lanzador con 18-4, fue colocado en la lista de inactivos mientras MLB está investigando una acusación de abuso de violencia doméstica. Se fue para la postemporada.
Y eso es solo una lista parcial.
"Una de las cosas que aprendes en este trabajo es la apreciación de lo que todos pasamos", dijo el gerente de los Astros, AJ Hinch. “Solo somos 30 de nosotros. Conozco a Boonie personalmente. Estoy en contacto con él y hay bromas de ida y vuelta durante todo el año. Y creo que ha hecho un trabajo tremendo para mantener el equilibrio.
“Una cosa es desempeñarse en este trabajo, ser bueno en este trabajo y ganar tantos juegos como él. Pero ha podido mantener el equilibrio necesario para atravesar los picos y los valles ".
Boone no solo mantuvo el equilibrio, sino que por necesidad descubrió a Gio Urshela y Mike Tauchman. Aprovechó al máximo Luke Voit, Clint Frasier, Cameron Maybin, Mike Ford y Tyler Wade, por nombrar algunos.
Es tentador incluso apoyar a Cashman como Ejecutivo del Año por la forma en que construyó el equipo, obteniendo a tipos como Urshela y Maybin por dinero, además de Voit y Tauchman en intercambios menores. Incluso la firma del jugador de cuadro multifacético DJ LeMahieu a un contrato de dos años y $ 24 millones debe ser uno de los mejores acuerdos de agente libre de la temporada baja.
Pero Cashman también dejó a Boone con la confusión de la rotación inicial, y un bullpen profundo que tuvo que esforzarse al máximo para llegar a donde están los Yankees en este momento.
Hasta ahora, Boone ha tenido que usar 19 lanzadores en los primeros tres juegos de ALCS con un juego de bullpen de barril si el Juego 4 se juega el miércoles por la noche.
Los Astros están haciendo lo mismo, aunque nadie puede quejarse porque Hinch está siguiendo a Zack Greinke, Justin Verlander y Gerrit Cole con los suyos.
No tiene precedentes que Boone e Hinch hayan dejado sus respectivas conferencias de prensa el martes por la noche sin siquiera anunciar un partido inaugural el miércoles para un juego de postemporada tan importante.
Si los dioses del clima intervienen y el juego se retrasa un día, será Greinke contra Masahiro Tanaka en el Juego 4, y todos nos salvaremos.
Hinch dijo que los juegos de bullpen son "aterradores y peligrosos" para un gerente.
“Hay mucha presión. Estás pidiendo a los muchachos que sean realmente buenos ese día”, dijo. "Y cuando el juego cambia o el juego se alarga o sucede algo imprevisto, se vuelve un poco más difícil de manejar perfectamente en ese juego".
Hinch ha tenido a cada uno de sus titulares por mucho tiempo en los primeros tres juegos con una melodía de 19 2/3 entradas.
"Esa es la vieja escuela", dijo Hinch.
Boone ya ha manejado tres juegos de bullpen ya que sus titulares totalizaron 12 2/3 entradas.
Es una victoria obligada para los Yankees en el 4to Juego, siempre que se juegue. Si Boone ejecuta esa victoria, pulirá aún más sus credenciales de Gerente del Año.
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