Esta fanática de los Yankees, odia las comparaciones pero el chico se le merece, ya que el chico en todo los juegos a demostrado su valia y su grandeza tanto que muchos analistas lo están comparando con un gran Yankee como Joe DiMaggio.
Tenemos que nuestra segunda base de los Yankees, Gleyber Torres, predijo antes del 1er juego de la American League Championship Series, quien sería la estrella de ese juego.
"Voy a ganar el cinturón", dijo Torres al jardinero derecho Aaron Judge.
Para informar un poquito, tenemos que el cinturón que mencionaba Torres, es el "Jugador del Juego" estilo campeonato otorgado después de cada victoria de Nueva York a la estrella del juego. Siendo estos los Yankees, donde no se corta ninguna esquina ni se considera aceptable ningún diamante de imitación, el cinturón presenta tres placas de oro con logotipos de los Yankees, piedras Swarovski y una correa de cuero hecha a mano con filigrana de cestería.
Gleyber Torres, s el chico que ganó el cinturón en el juego decisivo de la Serie de la División de la Liga Americana, quien a los 22 años es uno de los mejores bateadores jóvenes en los últimos 50 años, y quien juega los juegos más presionados con una gran sonrisa, se nota su seguridad y su amor al juego. Es un joven que se ha ganado el respeto de sus fanáticos, de sus compañeros y de todos demostrando una grandeza, dejando a su paso muchas mandíbulas caídas.
"Le encanta el gran momento", dijo el lanzador Zack Britton. "A los 22 años todavía estaba tratando de descubrir cómo sacar a los muchachos en Triple-A".
Por supuesto, Torres ganó el cinturón, y lo hizo con uno de los mejores juegos de postemporada de cualquier joven bateador. Torres roció tres hits alrededor del patio y conectó cinco carreras contra tres lanzadores diferentes cuando los Yankees abrumaron a Houston, 7-0.
Torres y Andruw Jones (Juego 1 de la Serie Mundial de 1996) son los únicos jugadores que tienen tres hits y cinco carreras impulsadas en un juego de postemporada antes de cumplir 23 años.
Esto les presentó a los Yankees un dilema: se supone que el ganador del cinturón de la victoria anterior debe presentar el cinturón al último ganador, quien luego debe hacer un breve discurso de aceptación. A este ritmo, los Yankees también podrían retirarse del cinturón con Torres.
La mejor parte no podía esperar a la presentación posterior al juego. Durante un cambio de pitcheo en la séptima entrada, que Torres causó con un sencillo de dos carreras y dos golpes, el Judge rodeó a Torres con el brazo y dijo con profundo aprecio: "Hombre, ¿sabes lo especial que eres?"
Hagamos un balance de lo que ha hecho el niño. Ha bateado más jonrones que cualquier medio jugador de cuadro en la historia en sus dos primeras temporadas (62), es un bateador de .364 en nueve juegos de postemporada, y su promedio de carrera de .328 con corredores en posición de anotación es mejor que cualquier otro jugador en Esta edad en la era divisional (desde 1969), excepto Garry Templeton, Ronald Acuña Jr., Ted Simmons y Johnny Bench.
Alguien le preguntó a Torres si su éxito a esta edad lo sorprendió. Dada la confianza del niño, este fue el equivalente de la bola rápida de primer lanzamiento que Zack Greinke lanzó a Torres en la sexta entrada, la que metió en las cajas de Crawford para un jonrón. "Quiero decir, en realidad no", dijo. “Durante mi carrera en la liga menor me preparé muy bien para cada situación el año pasado. Aprovecho toda la experiencia y ahora solo pongo toda la experiencia en mi juego”.
Este es un niño que bateó 24 jonrones en 373 juegos en las menores. Ha sido un jugador mucho mejor en las Grandes Ligas de lo que incluso los Yankees esperaban cuando lo obtuvieron en un intercambio de 2016 con los Cachorros por Aroldis Chapman. Aquí hay otra ventana a Torres: tiene una carrera de .263 con las bases vacías, pero .292 con corredores y .328 con corredores en posición anotadora.
"Siempre he sido así", dijo. “Desde que era niño me encantaba batear con corredores. En realidad, hay momentos en que no hay corredores cuando no tengo la misma energía. Es más difícil”.
Britton dijo: “Creo que se siente cómodo en su entorno. El ambiente aquí le permite sentirse cómodo y seguro. No tenía eso cuando estaba llegando”.
Los Yankees no podrían haber ganado un juego de manera más completa. "Jugaron un gran juego", dijo el campocorto de Houston Carlos Correa, "un juego casi perfecto".
Los Yankees maltrataron a Greinke cuando lo vieron por segunda vez, y lo siguieron marcando como un lanzador de postemporada poco confiable. Golpearon a Ryan Pressly, que había sido un incondicional del bullpen de Houston, y al novato Bryan Abreu, quien el manager AJ Hinch pensó que podría ser un impulso comodín con su control deslizante. Cada uno ahora se mueve hacia abajo en el orden jerárquico de opciones de alivio de Hinch.
Giancarlo Stanton tiene calidad, largos turnos al bate. La defensa ha sido hermética, incluido un misil de 87.8 mph que el juez lanzó a la primera base con el pie trasero y luego se deslizó para doblar a Alex Bregman. "¿Eso es todo?", Preguntó el juez cuando se le habló de la lectura de la pistola radar.
El gerente Aaron Boone está presionando cada botón derecho. Comenzó Masahiro Tanaka en lugar de James Paxton y ahora Tanaka tiene una efectividad de 1.32 en siete aperturas de postemporada. Solo Christy Mathewson, Sandy Koufax y Eddie Plank han sido mejores en la postemporada con tanto trabajo.
Le dio la vuelta al juego a su bullpen cuando Tanaka cruzó seis entradas porque nunca más será acusado de dejar un titular en demasiado tiempo, no con ese bullpen. Nunca ha permitido que ninguno de sus nueve titulares de postemporada enfrente a más de 20 bateadores.
Y Boone promovió a Torres al tercer lugar en el orden de bateo y sacó a Brett Gardner de allí porque los Astros no tienen relevistas zurdos, evitando que Boone se separe de bateadores del mismo lado. Y Torres sigue haciendo su suplantación de Joe DiMaggio.
"No puedo esperar para ver el resto de su carrera", dijo el jardinero Aaron Hicks.
Entre las muchas habilidades que hacen de Torres una superestrella está su capacidad para ajustar su swing según el conteo y la ubicación del campo. Batea cerca o por encima de .700 en los tres niveles de la zona de ataque: bajo, medio y alto. Es el único jugador en la Liga Americana que bateó 10 o más jonrones de cada uno de esos tres niveles.
El 1er juego exhibió todo ese rango de bateo. En el cuarto se hundió en sus gruesas piernas para sacar un deslizador de primer lanzamiento de Greinke para un doble RBI. En el sexto aplastó su golpe para subir a una bola rápida de Greinke para un jonrón. Y en el séptimo, justo después de que el entrenador de pitcheo de Houston, Brent Strom, pidiera tiempo de espera para elaborar una estrategia con Pressly sobre cómo lanzar Torres, armó un exquisito turno al bate de seis lanzamientos en el que escupió en dos bolas rápidas justo antes del lanzamiento. Bola curva de conteo completo, hacia abajo y hacia afuera en el centro del campo para un sencillo de dos carreras.
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