La visita del equipo uruguayo desde el 2001 es una de las citas más esperadas para los aficionados del equipo de la Vinotinto. Es una cita de las que están llamadas a llenar la corriente del equipo con maniobras heroica. Con una marea de bajas pero con el gancho suficiente como para dar una sorpresa.

Teniendo a un público con semejante expectación, Uruguay siempre le tiene ganas, ocurriendo ante la nueva visita Celeste una ausencia en la Vinotinto. Llegando al extremo que afecta al bloque medular de los titulares, debido a la sucesión de las lesiones que encontró José Pereiro.

Ante la ausencia de Yangel Herrera, Yeferson Soteldo, Salomón Rondón, Darwin Machis, Yordan Osorio y Wilker Ángel, desmontan la línea estratégica de Pereiro, quien consiente de que tantas bajas van minimizando las posibilidades de plantar cara con entereza a un equipo de Uruguay más alto.

Mientras tanto en la medular el capitán Rincón en compañía de Moreno y Casseres deberán hacer cruce de fuego contra Valverde y Nahitan Nandez.

Si contra todo pronóstico Peseiro consigue establecer un orden que permita un futbol con mayor dinámica entre la defensa y el ataque de Josef, Otero y Savariano, se podría doblegar la garra charrúa.