Partido con desenlace distinto en un derbi catalán,soso y aburrido.Quizás la tensión de ambos, marcaba un partido que determinó el descenso de los pericos, un equipo blanquiazul que demostró amor propio, pero no la calidad suficiente como para salvar la categoría, donde solo el pundonor de los David López y Marc Roca, así como la incontestable calidad de Raúl de Tomás,no fue suficiente para doblegar a un tosco equipo blaugrana.

El Espanyol, hizo arenga de su profesionalidad y atrincherado atrás, buscó las contras de Embarba y Didac Vila,poniendo en aprieto a un seguro Ter Stegen.

El Barcelona, tocaba y tocaba, pero sin profundidad. Únicamente pudo batir a Diego López, con un gol del siempre oportunista y matador, Luis Suárez.

Trás el gol culé, los pericos entregaron su alma al anunciado descenso y solo pudieron esperar que las manecillas de un ansioso reloj, llegaran a su final.

Una vez el trencilla pitó sentencia, los jugadores pericos desolados, cayeron entre lágrimas al césped, despidiendo así, una nefasta temporada.

Mientras, los azulgranas y pese a ser un espejismo del equipo que jugó ante el Villarreal,sigue la estela del Real Madrid, que mañana recibe a un necesitado Alavés.

Quedan doce puntos y llega la hora de coger aire o morir en el intento, ya hay un equipo descendido, Mallorca y Leganés son serios candidatos a acompañarlo, pero mientras las matemáticas sigan siendo exactas...