Tras analizar el Getafe de Bordalás nos trasladamos al sur para repasar las claves del equipo de Julen Lopetegui: el Sevilla FC.

Podemos considerar en cierta medida a Lopetegui como un genio incomprendido. Como en un cuadro de Kandinsky, Julen va dando pinceladas que muchos no entienden; cada detalle en su lienzo particular, la pizarra, recibe severas críticas y aún así, él sigue usando colores y formas que a pesar de no convencer a un sector de la afición, dan resultado. Y es que tras 27 jornadas del campeonato liguero, el Sevilla se encuentra en tercera posición, además de haber alcanzado los octavos de final de la Europa League.

Juego sin balón

En el caso del conjunto hispalense, el comportamiento del equipo cuando defiende varía según el planteamiento del partido y los jugadores elegidos por Julen Lopetegui para disputar el encuentro. A partir de ahí, podemos observar dos variaciones bien diferenciadas.

En la primera, más ofensiva, Fernando queda como el único jugador de corte defensivo en el mediocampo, acompañado de dos jugadores más creativos que pueden variar entre nombres como Banega, Óliver Torres, Joan Jordán y Franco Vázquez. Lopetegui opta por esta opción frecuentemente cuando prevé que los suyos van a gozar de una posesión holgada frente al equipo rival, esta diferencia de posesión hace que el mediocampo no tenga que preocuparse tanto por defender y que las necesidades del partido se inclinen por jugadores capaces de romper el bloque defensivo rival.

Con este esquema, el equipo es más agresivo a la hora de recuperar el balón ejerciendo presión y dificultando la salida de balón de la zaga oponente, en caso de no lograrlo, será Fernando el encargado de evitar que el contraataque se convierta en un ataque prometedor.

Alineación Sevillista con Fernando como único pivote

Por otro lado, en partidos más disputados en términos de posesión, Lopetegui prefiere un mediocampo más solido con Gudelj acompañando a Fernando, en este caso, Gudelj se introduce entre los centrales liberando así al brasileño. El equipo, en este caso no presiona tan arriba sino que prefiere replegar más atrás.

Alineación sevillista con Gudelj acompañando a Fernando

Además, cabe destacar la perfecta complementación de dos recién llegados como Diego Carlos y Jules Koundé que aún siendo su primera temporada juntos están firmando actuaciones destacables e incluso llamando la atención de grandes clubes europeos.

Juego con balón

Como ya hemos visto en el sistema defensivo, Lopetegui es un defensor acérrimo del 433 tan de moda en los últimos años. Esquema que el vasco complementa a menudo con un juego asociativo de posesión, criticado por algunos sectores de la afición por falta de verticalidad.

Comenzando desde atrás, los laterales son claves en este sistema, pues su aportación ofensiva provoca situaciones de superioridad en ataque que estos aprovechan para lanzar centros al área. Los laterales sevillistas reúnen las características necesarias para dicho sistema pues ambos son rápidos y tienen una innegable vocación ofensiva.

Ya en el mediocampo, encontramos jugadores con muy buen trato de balón, fundamentales para poder desarrollar un estilo de juego asociativo, además de ser capaces de filtrar balones entre las líneas rivales propiciando situaciones de peligro.

Por último, en la delantera, el Sevilla cuenta con jugadores de perfiles muy distintos.

Este contraste de perfiles se acentúa en la posición de delantero centro, Luuk De Jong, el gigante holandés, lejos de ser un goleador esta temporada, lleva a cabo su labor en las sombras, desahoga el juego bajando al mediocampo, pelea con los centrales y crea espacios que son aprovechados por sus compañeros. En las antípodas se encuentra Youssef En-Nesyri, la velocidad del marroquí brinda a Lopetegui la oportunidad de jugar a un juego de contraataque si es necesario, una alternativa más que necesaria.

Por las bandas, Lucas Ocampos, capital en el conjunto hispalense, sirve eventualmente como vía de escape a la presión rival, su potencia y velocidad le convierten en uno de los jugadores más peligrosos de la Liga Santander. Por otro lado, el fichaje invernal de Suso ha sido como un soplo de aire fresco para esta delantera que se estaba quedando sin ideas, su brillante calidad le hace ser el primer candidato para la banda derecha, aunque eso suponga desplazar a Ocampos a la izquierda, donde solían jugar Oliver Torres o Nolito.

Conclusión

Monchi lo ha vuelto a hacer, con un Sevilla repleto de caras nuevas ha logrado una temporada bastante buena que a pesar de algunas críticas ha vuelto a llevar al Sevilla a donde se merece estar. Tras una destacable temporada de los muchachos de Lopetegui y a la espera de la resolución de La Liga respecto a la presente temporada, el sevillismo vuelve a ilusionarse imaginando el himno de la Champions League resonar de nuevo en el césped del Ramón Sánchez Pizjuán.

Álvaro Anastasio Ruiz.