Quizás es un poco pronto como para sacar conclusiones, pero parece que el declive de Cristiano Ronaldo es una evidencia desde la pasada temporada a excepción del último mes en el que fue decisivo. Un jugador que perdió el regate hace mucho tiempo y la velocidad que le caracterizaba en España va menguando partido a partido. Pero las cosas han cambiado para el portugués. En Italia juega sin disimulo de delantero centro, pero en una liga como el Calcio donde la "defensa" es su denominación de origen parece que se le está atragantando al vigente Balón de Oro. Y es que en la Juventus goza de alguna ocasión de gol pero siempre rodeado de contrarios y esa es una gran diferencia para que su olfato se ponga a punto como esperan los aficionados que llenan cada partido en el Juventus Stadium.
La suerte parece haberse quedado en la capital española y es que en el Real Madrid parece que su marcha a liberado la tensión que había sobre Gareth Bale, que se ha echado el equipo a las espaldas y sobre todo un Karim Benzema que parece irreconocible. El francés está en plan killer donde ya lleva en tres partidos cuatro goles, a estas alturas la pasada campaña no se había estrenado todavía, pero sobre todo el efecto vertiginoso que produce a su alrededor particularmente en Marco Asensio y en Dani Carvajal.
En Turin ya se oyen algunas voces que cuestionan el pago de más de cien millones de euros para traer al astro portugués tras las tres primeras jornadas del Calcio donde la Juve ha ganado sin necesitar su participación ni en los goles ni en el juego. Habrá que esperar para comprobarlo.
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